Ser un canal abierto

La creación podría pensarse como una forma de reordenar lo que ya existe.

La ley de la conservación de la energía afirma que la energía no se crea ni se destruye, solo se transforma.

La energía es la esencia de todo lo que sucede y de todo lo que es.

Somos conductores, no creamos, transformamos.

Imaginate una tubería que tiene una válvula, puede estar cerrada, abierta o en una posición intermedia. A esa tubería llega agua y líquidos de todo tipo, algunos nos hacen bien y otros no.

Si cerramos la válvula evitamos contaminantes pero nos quedamos sin agua.

Ser un canal abierto significa permitir que la energía circule a través de nosotros y ser un filtro más que un obstáculo.

El ciclo consiste en recibir, transformar y transmitir.

Que la energía siga su camino, ser una fuente también para los demás.

La creatividad, las oportunidades y la energía fluyen en todo momento y en todas partes. La corriente trae muchas cosas buenas, solo hay que sentarse a esperar y prestar atención.